MIEMBROS

jueves, 11 de septiembre de 2014

¿Qué es otaku? Parte I

Otaku

Se refiere popularmente en Japón a una persona con aquerenciarse de manera obsesiva que se aplique a cualquier tema o campo de fandom de anime y manga. Este término se origina en un ensayo realizado por Akio Nakamori de 1983 en la revista Manga Burikko.


Sin embargo, este término se emplea de diferente manera en el occidente mediante adjetivos como: friki*, gamer* o nerd*, ya que son aficionados a ciertos tipos de cultura popular japonesa en especial anime, manga y cosplay. 




Su negatividad deriva de la perspectiva estereotipada de los otakus, es decir, fanatismo excesivo por la ficción de animaciones y mangas y sobre los reporteros de comunicación de 1980 que hicieron conocido al asesino serial, Tsutomu Mizaki, el cual fue nombrado como “Asesino Otaku”.  

   
Etimología

Otaku proviene del término japonés para la casa de otra persona o familia, también se usa para referirse metafóricamente como un pronombre de  segunda persona, es decir, persona honorífico. Sin embargo, su traducción literal es usted.  En 1980 fue la primera vez que públicamente se utilizo el término en una obra del humorista y ensayista Akio Nakamori, en el cual se genera una Investigación de Otakus (Otaku no Kenkyū) que se publica impreso en la revista Lolicon Manga Burikko, utilizó el término para los fanáticos desagradables de la caricaturas, también se uso como persona honorífica o que los mismos fanáticos lo utilizaran para referirse a ellos sí mismos. Debido al mal uso la palabra otaku inició una torpeza social, así el término fue elegido para etiquetar a los fans de la cultura japonesa en el área de entretenimiento.



El incidente de Tsutomu Mizaki* en 1989 llevo perjudicialmente a los fandom a la atención nacional, pero el término y los seguidores del anime fueron reivindicado por medio de la publicación del llamado “Libro de Otaku” (Otaku no Hon) escrito por Tomohiro Machiyama el cual popularizo el termino.

Uso

En la jerga moderna del japonés el término es usado como equivalente a geek o nerd, ya que puede referirse a cualquier aficionado de cualquier tema en particular, afición o cualquier forma de entretenimiento, este término es el mismo para hombres y mujeres, mientras que la palabra en el exterior del país es unas para solo seguidores del anime, manga y cosplay que disfrutan de esta cultura aunque en Japón puede ser menospreciada  por que en su cultura es para definir a una persona obsesiva (no necesariamente de las animaciones japonesas) en particular, en casos muy extremos. Ej: un hombre enamorado de un dakimakura, es decir, almohada que posee una imagen femenina de anime larga.


Subcultura Otaku


Se asocia como la cultura japonesa real como un producto del sistema escolar y la sociedad, ya que, la estructura de las escuelas japonesas en cada clase funciona como sistemas de castas, con los clubes como una excepción de la jerarquía social, de este modo, esos clubes serán reconocidos y alimentados atendiendo a los interés otakus. Además, la estructura es vertical de la sociedad identificada con los valores de un individuo de acuerdo a su éxito. A fines de 1980 la mentalidad de los hombres poco atléticos y atractivo se apoyo en la perspectiva de trabajar para académicos para obtener un buen trabajo y casarse, esta expectativa cambio ya que los que no fueron capaces de ser exitosos socialmente o que carecían de confianza en sí mismos o de sus habilidades interpersonales con la conciencia de que no serian capaces de tener éxito en la sociedad. La segunda opción que se torno los individuos japoneses dio espacio a la persecución de sus intereses, a menudo en la edad adulta y con su estilo de vida priorizaba esos intereses fomentando la creación de la subcultura.




*Próximamente historia y empleos.

martes, 9 de septiembre de 2014

LIBROS TRABAJOS SOCIAL (BIBLIOGRAFÍA)

  1. Administración de recursos humanos, Idalberto Chiavenato.
  2. aspectos sociologicos del desempleo/paro y de la precariedad laboral, Fco. Javier Rubio Arribas.
  3. Breve historia del Neoliberalismo, David Harvey.
  4. El desarrollo humano y la desigualdad, Informe sobre Desarrollo Humano. México 2002
  5. “Dime cómo te llamas y te diré quién eres”: La ascendencia como mecanismo de diferenciación social en Chile, Javier Núñez y Graciela Pérez. Santiago, Dic. 2007.
  6. Educación popular y cambio social en América Latina, Oscar Jara Holliday.
  7. El concepto de Precariedad, Fundación Gaztelan.
  8. El concepto de "clase" en Karl Marx,  Mario Domínguez
  9. Estudios estadísticos y prospectivos. Serie 4. Enfoques para la medición de la pobreza. Breve revisión de la literatura, Juan Carlos Feres y Xavier Mancero. CEPAL. Santiago de Chile, enero de 2001.
  10. Informalidad laboral y políticas públicas en Chile. Marcela Perticara y Pablo Celhay, Facultad de Economía y Negocios, Universidad Alberto Hurtado. Diciembre 2010.
  11. La dimensión económica de la pobreza y precariedad urbana en las ciudades latinoamericanas. Implicaciones para las políticas del hábitat, Lucy  Winchester.
  12. La teoría de la estratificación social de Weber: un análisis crítico. Celia Duek y Graciela Inda
  13. Estudios estadísticos y prospectivos. Serie 6. La vulnerabilidad social y sus desafíos: una mirada desde América Latina. Roberto Pizarro. CEPAL. Santiago de Chile, febrero de 2001.
  14. Las ideas de Marx sobre las clases sociales desde la actualidad. Ortelio V. Pérez Díaz
  15. Manual de resistencia anticapitalista, José López. Octubre de 2010.
  16. Seguridad social, Ricardo Nugent.
  17. Ser niño “huacho” en la historia de Chile. Siglo XIX. Gabriel Salazar V. Investigador de sur, centro de estudios sociales.
  18. Las causas profundas de la tragedia de Valparaíso, Sergio Grez Toso. Rebelión. 17-04-2014.
  19. XV Seminario latinoamericano de trabajo social nuevos escenarios y desafíos para el trabajo social Guatemala, C.A. Gerencia social. M. Sc. Lorena Molina M. www.ts.ucr.ac.cr
  20. Tercer sector: análisis, desafíos y competencia desde el trabajo social. Fco. Xavier Aguilar Fernández.
  21. Trabajo social en empresa, Luis A. Valverde Obando. 1990.
  22. La participación y la construcción de ciudadanía, Diego Palma.


****Próximas Actualizaciones****


Instrumentación y técnicas, trabajo social. Parte I

1.- Entrevista semi estructurada o mixta. Es aquella  que despliega una estrategia mixta alternando preguntas cerradas y preguntas espontáneas. 

2.-Cuestionario. es un documento formado por un conjunto de preguntas que deben estar redactadas de forma coherente y organizadas, secuenciadas y estructuradas de acuerdo con una determinada planificación con el fin de que sus respuestas nos puedan ofrecer toda la información que se precisa.

3.-Observación participante y observación no participante u ordinaria. Es una técnica en la que usted puede optar por convertirse en un miembro más del grupo desde el interior de la organización, permite captar no solo los fenómenos objetivos y manifiestos, sino también el sentido subjetivo de muchos comportamientos sociales, por otra parte esta observación ordinaria es un instrumento de recolección de información, consiste en el registro sistemático, valido y confiable de comportamientos o conducta manifestada.

4.- Cuaderno de campo.  Es una herramienta usada por investigadores de varias áreas para hacer anotaciones cuando ejecutan trabajos de campos de fuente primaria. la cual sirve principalmente para la elaboración de investigaciones las que se transforman en documentos, presentes en los archivos personales de los académicos y dependiendo del valor históricas de sus obras.

5.- FODA. Es una sigla que significa Fortaleza, Oportunidad, Debilidad, Amenaza, la cual es la que análisis de variables controladas, es decir, las debilidades y fortalezas son internas de la organización y por lo tanto, se puede actuar sobre ellas con mayor facilidades y de variables no controlables, es decir, las oportunidades y amenazas se presentan en el contexto y la mayor acción que podemos tomar con respecto a ellas es preverlas y actuar a nuestra conveniencia, ya que, es una herramienta de análisis estratégicos que permite analizar elementos internos de una organización (controlables), tales como: Fortalezas y Debilidades (factores internos) y Oportunidades y Debilidades (factores externos).

Modelo de Burke-Litwin. (MODELO DE GESTIÓN)


Es un modelo causal de desempeño de cambio organizacional, el cual busca el cambio organizacional en una especie de caos. Integra una gama de factores que proporcionan algún grado de dirección para entender como las organizaciones trabajaban en medio de este caos.
Uso del modelo causal de desempeño e cambio organizacional. 
Aplicaciones. 
  • Analizar el cambio organizacional. 
  •  Entender el cambio organizacional.
  • Lidiar con el cambio organizacional. 
  •  Predecir el cambio.


Pasos del modelo de Burke-Litwin. 

Proceso. Burke y Litwin distinguen entre los factores transformacionales (líder ayuda a los colaboradores para que alcancen la meta dada) y los factores transaccionales (líder que busca que sus colaboradores consigan más de lo que esperaban por si solos antes de ser liderados). 
1.    El cambio organizacional sucede en respuesta al ambiente externo, que afecta directamente a la misión, la estrategia, la dirección y la cultura de la organizacional. 
2.    A su vez, se afectan los factores transaccionales: estructuras, sistemas, practicas, practicas de gestión, y el clima laboral.
3.    Juntos estos factores transformacionales y transaccionales, afectan la motivación, que a su vez afecta el desempeño. 
4.    Hay un lazo de retroalimentación: el desempeño organizacional puede efectuar directamente el ambiente externo.            

Beneficios
-       El modelo incluye ciclos de retroalimentación. 
-       El marco del modelo es integral muchos factores importantes de cambio.
-       El ambiente externo es el factor principal. 
-       Muestra jerarquización y causalidad entre los elementos. 
-     El modelo distingue un conjunto de variables que influyen y son influenciadas por el clima organizacional (del día a día, a nivel transaccional) y otras variables que a su vez son influenciados por la cultura organizacional (fundamental, a nivel transformacional)

Limitaciones. 
-       El modelo es un poco complejo. 
-       Algunos cambios organizacionales se pueden iniciar con liderazgo por factores internos en lugar de propiciarse desde el ambiente externo.

Antecedentes teóricos y conceptuales del femicidio. NIVEL GENERAL

Etimología palabras claves y  relaciones: 

      I.        La infidelidad.
La palabra infiel e infidelidad  del  prefijo “in” es un privativo o negativo, también derivado del latín, la palabra fidelidad incluye principalmente el tema de la  confianza, la fe y la palabra empeñada, por lo tanto se alude a la infidelidad cuando existe una ruptura,  ausencia o falta de confianza o fe. La palabra infiel se utilizó en castellano inicialmente para referirse a las personas que  profesaban una fe distinta a la católica apostólica romana, con este calificativo se acusaba y perseguía a los judíos, protestantes y musulmanes en España.
    II.        El adulterio.

La palabra adulterio deriva de la palabra latina adulterare que significa “alterar”, “falsificar” y “deshonrar”, de ella deriva posteriormente la palabra adúltero/a, reservada para quien comete adulterio. La palabra latina adulterium proviene de dos términos: “ad”, preposición que significa “a” y “alter” que significa “otro”, estas raíces lingüísticas se refieren por lo tanto a una relación con otro, alguien distinto de la unión conyugal.

Relación entre Infidelidad y adulterio.
Usualmente se utilizan estos términos como sinónimos, pero existe una diferencia entre ambos, según la real academia de la lengua española;  adulterar significa “viciar” o “falsificar una cosa”, “corromper” o “mezclar”. El vocablo adulterio es un término que se utiliza para aquellos que teniendo un vínculo legal con otra persona, estando casados, mantienen relaciones sexuales con un tercero que no es el marido ni la esposa. Por lo tanto se denomina adulterio a las infidelidades dentro del matrimonio, constantes u ocasionales con un tercero, sin hacer referencia al vínculo afectivo sino exclusivamente al aspecto sexual de la relación. Es un término que se utiliza principalmente a nivel legal y su uso es más restrictivo que el de infidelidad.
      I.        Infidelidad y género: La infidelidad en la mujer.

Desde los tiempos remotos se cree que las mujeres son más fieles que los varones, si bien con el transcurso de la sociedad esto está cambiando progresivamente aunque se nota que los porcentajes se tienden a emparejar, todavía los niveles de engaños e infidelidades son menores en las mujeres.  Como respuesta de este fenómeno, desde la antropología podemos decir que la mujer o la hembra en las comunidades primitivas tiende a quedarse cuidando de su familia, la tarea frecuente de las mujeres en la mayoría de las tribus primitivas está relacionada con el cuidado de la descendencia, incluso hoy día el cuidado de los hijos pequeños está más asociado con una labor femenina.

La mujer no tenía tiempo de ocuparse en tener relaciones por fuera de la pareja, ya que debía estar concentrada en las tareas domésticas y el cuidado de sus hijos, mientras el hombre primitivo era el que habitualmente salía a cazar y posteriormente el varón moderno era quien salía y debía traer el sustento mediante el trabajo, la mujer era la que habitualmente se quedaba en la casa ocupándose de las labores hogareñas y los hijos. Con la llegada de la modernidad se ha ido modificando, pero todavía hoy esta división de tareas tiene gran influencia y puede generar ciertas dificultades.

Las mujeres socialmente han avanzado mucho en cuanto al reconocimiento de sus derechos, pero aún hoy existe una discriminación que en algunos casos es marcada, es decir, la presión social hace que las mujeres no se permitan vivir la sexualidad tan libremente como el hombre. Las mujeres habitualmente desde los valores sociales tradicionales, sólo pueden disfrutar de su sexualidad dentro de una relación de pareja monógama, por lo que las infidelidades son mal vistas.En general las mujeres no suelen tener aventuras fugaces, pero en el caso de que esto ocurra tienden a ocultarlo porque tienen temor de ser señaladas o juzgadas por sus conductas, con mucho más rigor que los varones. Generalmente cuando en la pareja ha habido engaños, si la mujer se ha enamorado de otro hombre es probable que quiera terminar con su marido, en cambio los varones incluso enamorados tienden a perpetuar ambas relaciones y son más reacios a terminar con su matrimonio. Parece ser que la mujer tiene mayores dificultades de compartir su amor con dos personas, en cambio a los varones esto les resulta algo más fácil.

 A las mujeres en general les afecta más que sus maridos se enamoren de otra, en cambio los varones se sienten más traicionados si su pareja tiene sexo con otro. Sin embargo, para las mujeres una aventura aparece como la secuela de una larga relación de pareja insatisfactoria, no suele ser común que una mujer sostenga un amante por el sólo hecho de obtener buen sexo de él, cabe mencionar que a las mujeres que viven en comunidades más tradicionales o aquellas que aún mantienen esquemas de pensamiento conservador tienden a tolerar las infidelidades o los engaños de su pareja, mientras las mismas se mantengan dentro de ciertos límites. Antiguamente la mujer tradicional era muy dependiente del varón, no se preocupaba por su autoestima y en general su opinión no era tan tenida en cuenta, por eso solía aceptar cualquier condición y muchas veces toleraba en silencio incontables infidelidades de su marido.
En la actualidad, las mujeres son más independientes, libres y buscan una relación más igualitaria, ya que sale más de su casa, va a trabajar, a estudiar, tiene proyectos personales y profesionales propios,esto hace también que se le presenten más oportunidades que antes, si bien hay algunas que todavía aceptan ese tipo de condiciones, ya no están tan dispuestas a convivir con los engaños e infidelidades de su marido. En la mayoría de las sociedades occidentales y en particular en las grandes ciudades los porcentajes de varones y mujeres infieles tienden a equipararse, aunque todavía los hombres lleven la delantera, esto se explica por varias razones, la mujer como se menciona ya no tiene un rol pasivo en su vida, además está más dispuesta a buscar otros caminos cuando encuentra dificultades en su pareja.

Las edades en donde la infidelidad se da con mayor frecuencia en las mujeres es un poco más elevada que en el hombre, entre los 35 y 50 años, si bien tanto en varones como en mujeres las fantasías suelen aparecer mucho antes y coinciden en cuanto a los tiempos, los varones parecen tomarse los permisos y pasar a la acción más tempranamente. Respecto del perdón, habitualmente las mujeres con más facilidad vuelven a creer en los varones si estos se arrepienten realmente, en cambio a los varones les cuesta más si ellas los engañaron. En general cuando salió a la luz la infidelidad en una pareja, es más fácil superarla si fue llevada a cabo por el varón que si la protagonista fue la mujer.

    II.        Engañadores y engañados: rasgos y características de personalidad

Se señala a través del estudio de “Fidelidad e Infidelidad en las Relaciones de Pareja” del psicólogo argentino,  Camacho, sostiene lo siguiente:

“es difícil hablar de características homogéneas, ya que todos podemos potencialmente ser engañados, lo cual hace casi imposible dar estilos o rasgos de personalidad definidos.”Camacho, Javier. 2001. Fidelidad e Infidelidad en las Relaciones de Pareja. Página 68. Cap.7.

Camacho, indica que sólo de las características de aquellas personas que son sistemáticamente engañadas, que soportan o aceptan las infidelidades de su pareja se podría determinar algún cambio de personalidad, ya que, las personas engañadas tienden a tener una autoestima baja, son inseguras, dependientes,  tímidas, retraídas,  a su vez, les cuesta hacerse valer y respetar.

Usualmente son personas tolerantes y pacientes que priorizan los deseos y necesidades de su pareja por sobre los de ellas de mismas, suelen establecer vínculos fuertes y sólidos, son leales y fieles con sus amigos aunque su red social que generalmente, es reducida. Tienden a ser personas idealistas y románticas, que priorizan la imagen y la forma de su pareja para el exterior a la realidad de su vida afectiva diaria.

En resumen son personas confiadas y a veces en casos graves pueden ser negadoras, prefiriendo no ver ni lo obvio, tienden a justificar a los otros y suelen ser más comprensivas con los demás que con ellas mismas, ya que, valoran mucho las relaciones de pareja y respetan profundamente los vínculos afectivos, de este modo, tienden subestimarse y descalificarse, les cuesta aceptar los elogios y halagos. Los rasgos de dependencia pueden ser muy marcados y en algunas ocasiones las personas que son regularmente engañadas no pueden imaginar la vida fuera de una relación de pareja principalmente por que poseen  creencias y valores muy altos respecto de las relaciones de pareja, en general son personas que no tienen o no tuvieron muchas experiencias afectivas es probable que se sientan más feos/as, más tontos/as y menos exitosos/as o simpáticos/as que sus parejas.

 En casos graves puede que se sientan responsables por las infidelidades al pensar que ellos son los únicos culpables de que su pareja lo/la engañe, al no dar lo que se espera de ellos. Estas personas suelen tener una autoestima muy baja y se suelen exponer a situaciones de abuso, en general tienden a pensar que se tienen merecido lo que les pasa. Puede que tengan un trastorno de personalidad dependiente y que por temor a encontrarse solos/as acepten cualquier tipo de trato o condición por parte de su pareja.
   III.         
           Riesgos de la infidelidad: Los riesgos psíquicos.
Entre los riesgos psíquicos o psicológicos el principal es el estrés que puede tener manifestaciones de todo tipo: desde síntomas leves como irritabilidad, alteraciones del sueño e hipersensibilidad hasta ataques de pánico, problemas con abuso de sustancias, aumento de los problemas cardíacos, gastrointestinales, cefaleas, accidentes, etc. Esta es una manifestación normal y natural de los seres humanos que permite la adaptación y la supervivencia., ya que, la ansiedad tiene un mecanismo de autocontrol que en algunas ocasiones se pierde y genera las respuestas típicas del estrés. En la infidelidad y los engaños, la presión de tener que esconder evidencia, la sobrecarga genera el gasto de energía mental al tener que inventar excusas y coartadas para evitar ser descubierto suelen generar un nivel de ansiedad alto, que puede generar situaciones de estrés, además, a esto se le agrega el gasto de energía física extra que implica mantener varias relaciones y las sensaciones de temor por ser descubierto, el estrés está garantizado. Esta situación si se prolonga a lo largo del tiempo puede traer consecuencias graves ya que afectan la salud en general con manifestaciones de todo tipo. Para algunas personas que tienen una vida monótona y rutinaria, quizás este aumento de la ansiedad puede ser vivido en un primer momento como algo positivo ya que lo viven como algo divertido y novedoso que aporta un poco de emoción a su vida. Sin embargo, si esto se extiende o la persona se ve expuesta a situaciones difíciles: tales como ser descubierto, el estrés puede traer consecuencias, desde simples síntomas inespecíficos hasta serios problemas de salud. También puede haber riesgos de que se deterioren y se pierdan relaciones afectivas, esto es más que obvio por la posibilidad de tener problemas de pareja, pero también con los hijos, que algunas veces quedan envueltos en situaciones complejas y nocivas para ellos. Otro de los riesgos de las infidelidades son los sentimientos de culpabilidad y angustia por haber engañado a la pareja algunas veces después de tener relaciones ocasionales o infidelidades la gente suele replantearse qué hacer con su vida y como seguir con su pareja, esto puede ocasionar confusión en las metas vitales o dudas existenciales. La consumación del engaño lo único que hace en esos casos es precipitar la reflexión y el cuestionamiento respecto de la relación y los objetivos de vida.  En algunas oportunidades pueden surgir fuertes sentimientos de angustia debidos a convicciones morales o religiosas que conjuntamente con la culpa, pueden generar un estado depresivo o pérdida significativa de la energía y la voluntad.
  IV.        Celopatía.
La palabra Celopatía, deriva de “dsélos” que se refierea envidia y/o  deseo y a “týpos”es modelo,  que a su vez deriva de la palabra “celo” que viene del griego zeín = hervir a través del latín zelusque significa ardor o pasión por algo y apasionada sospecha e inquietud de la persona amada ponga interés en otro, rivalidad y objeto de deseo. Como patología la psicología sostiene que es una forma de delirio basado en el temor  a la infidelidad de la pareja que excede la respuesta natural ante la amenaza de perder una relación interpersonal, ya que, que los celos están presentes en todas las personas, sin distinción de su condición socio-económica o forma de crianza y manifestaciones en personalidades que aparentemente seguras de sí mismas.Una de las características que se destaca en las personas celosas es el rasgo de egoísmo, también tienen una relación con la vergüenza que es una respuesta natural del organismo. Sin embargo, algunas personas una vez que los padecen se sorprenden  de sí mismas pues los celos pueden ser sanos cuando la demanda es algo que se debe hacer sobre una base de equidad con la pareja, generalmente, acuden a este tipo de conducta que refleja carencias personales muy profundas. Es necesario mencionar que cuando el celo se vuelve nocivo se está hablando del celo carnal es cual se expresa en demandas inapropiadas y cuando se ejercen sentimientos enfermizos porque las demandas no son satisfechas, este sentimiento genera una inseguridad emocional por perder el dominio o sentir menoscabo en una relación interpersonal. Los celos se manifiestan ante la aparición de una situación o persona que el “YO” clasifica como  más dominante y competitivo, esto provoca que el individuo que los padece se sienta vulnerado atrapándolo en una red de circunstancia intransigente  tales como para privarla de libertad, aislarla, seguirla al trabajo, revisar sus relaciones externas , buscar evidencia de traición a su pareja. Según el estudio de Egene Mathes de la Western Illinois University, quien realizó experimentos de campo para comprobar las hipótesis de Greg White respecto a los celos, el cual consiste en:
(      A) La persona "celosa"
(      B) La persona "celada"
(     C) El "intruso" que puede ser otra persona conocida o desconocida.
  
Debido a dos razones fundamentales:
1.    La pérdida de la relación.
Representaría la pérdida de recompensas y beneficios de dicha relación: (A) la persona celosa ya no podrá compartir momentos de buena calidad o gratos con (B) la persona celada. Ejemplo: Ya no conversarán, jugarán o dormirán juntas.
2.    La pérdida de la seguridad en sí mismo o autoestima.
Para la persona celada (B) habría que escoger entre la persona celosa (A) y el intruso (C) y habría optado por el ultimo (C), lo cual sugiere que el intruso (C) es más importante o mejor que la persona celosa (A).
En la situación de la persona celosa (A) y la persona celada (B) puede ser creada por el entorno de trabajo, amistades y familia, aunque no tenga un interés directo en la relación entre ambos (envidia). Cuando se habla de personas celosas se habla en el contexto de un perfil definido por la pasión, la ansiedad, el neuroticismo e incluso algo de sadomasoquismo, estas personas sufren con frecuencia un profundo sentimiento de abandono, que la otra persona se ha reído de ellos y sus sentimientos, que los utilizando todo esto como un arma de doble filo de amor a odio en cuestión de segundos y el objeto de su amor pasa a ser el objetivo de su actual odio, cuando se llega a esta situación se pueden producir las agresiones físicas  y psicológicas. Los celos llevados al extremo constituyen en una patología autodestructiva, pues el sujeto vive en un estado de  infelicidad en función de sus miedos y sospechas de engaños, mucha de ellas completamente infundados y prácticamente no acepta la otra condición real que no sean sus evidencias que confirman su inseguridad en la relación, estos sujetos pueden ser hombres y mujeres sin distinción los cuales provocan mucha angustia e infelicidad y el daño al ser objeto de celo, incluso provocan una respuesta de agresión desmedida terminando en secuestro, asesinato y agresión física. Existe alrededor de tres tipos de celos: celos fraternales, celos juveniles y los celos amorosos este último, es el más común de todos y al que la mayoría lo asocian muchos filósofos, científicos, religiosos, eruditos y neurólogo los cuales definen la teoría del “celo” es la envidia y el egoísmo de una persona atraída al sexo opuesto siendo pretendida por otro individuo de su mismo género, es decir: 

Hombre o Mujer  enamorado/a + mujer o hombre + otro/a hombre o mujer enamorado/a de la misma mujer o hombre =  Celos.
Muchos concuerdan que los celos del hombre son mucho más fuertes que de los de la mujer, ya que su cerebro tiene más amplia la hipófisis, que controla este sentimiento, y la testosterona hace que su instinto de procreación y de protección sus hembras lo hagan perder más fácilmente la cordura e ingresar a los celos.
      I.        Violencia intrafamiliar o doméstica.

La palabra violencia proviene del latín de la cualidad de “violentus”,  que viene “vis” que significa fuerza y “lentus” que como sufijo tiene valor continuo y como adjetivo su duración cambia y significa lentitud, es decir, es el que continuamente ejerce violencia.  Es la aquella que ejecuta con fuerza o que se lleve contra la voluntad de la otra persona, este comportamiento violenta intenta imponer u obtener algo por la fuerza y causa daños físicos y/o psicológicos a la o las víctimas.

La palabra  intrafamiliar está formada con raíces latinas, sus componentes léxico son el prefijo “intra” que significa “dentro de”  y “familia” que significa “familia” más el sufijo de “ar” que significa “a”. La familia es una agrupación social más importante  de los seres humanos, se trata de una forma de organización que se basa en la relación consanguinidad, es decir, filiación entre padres e hijos y en el establecimiento de vínculos reconocidos social y legalmente, es decir, el matrimonio, los integrantes de una familia suelen vivir en un  mismo hogar y compartir la vida cotidianamente.

La violencia intrafamiliar es una conducta de agresión en la matriz familiar, es decir, es una acción que genera un descuido que el integrante de una familia ejerce contra otro integrante así produciéndole daños físicos y/o psicológicos. Puede incluir distintas formas de maltratos desde intimación hasta golpes pasando por el acoso o los insultos, el sujeto violento puede ejercer su acción contra un solo integrante (madre e hijo/s) o con todo el resto de los integrantes. Los expertos en este tipo de violencia establecen que existen diferentes dominaciones comunes que vienen a identifican al maltratador, las personas que coinciden en estas características:

        Son individuos muy dependientes a nivel emocional que manifiestan dicha dependencia a través de la agresión.
        Se muestran segura de sí mismas, sin embargo, bajo la imagen que se crean se esconde  ciudadanos que suelen tener problemas de autoestima.
        Necesitan humillar y acometer la sumisión de su pareja para sentirse bien y superiores.
        Tiene celos patológicos.
        No son capaces de demostrar sus sentimientos.


Ciclo de la violencia.

Según la psicóloga estadounidense Leonor Walker de 1978, que explica la dinámica cíclica de la violencia conyugal y la razón por la cual muchasmujeres se quedan atrapadas en dicha relación violenta de pareja. A partir de estas características se generan al interior del hogar que poseen violencia intrafamiliar se conforman tres fases diferenciadas:

1.    Fase de escalada de tensión. Se va produciendo lo que es una acumulación de tensión donde toman como protagonismo desde los episodios de celos pasando por faltas de respeto verbales o discusiones fuera de la normalidad.
2.    Fase violenta. Se produce el episodio agudo de violencia en la que se manifiesta a través de golpes de manera continua.
3.    Fase luna de miel. Es la cual el maltratador se calma muestra cierto arrepentimiento e incluso procede a llevar a cabo continuas muestras de cariño y de amor hacia su víctima.

Por medio de la adaptación  del Dr. C. Gonzales Salamea, médico familiar, de introducción al Estudio de la Pareja Humana de Clemencia Sarquis del estudio de la violencia intrafamiliar, sostiene “el 95% de estos casos consisten en malos tratos del varón hacia la mujer” (Gonzales, Carlos. Introducción al Estudio de la Pareja Humana. Pág. 1), sin embargo, se indica por varios estudios que existe una igualdad en el número de episodios violentos consumados por varones y por mujeres, y las consecuencias de estas agresiones tienen como resultado lesiones y miedo en la mujer.

También señala que existe un 5% de los incidentes restantes, la mayoría de los cuales ocurren entre parejas homosexuales (masculinas o femeninas), incluso  este tipo de malos tratos sea incluso más frecuente que lo observado en parejas heterosexuales, que las víctimas no los informen y que los médicos no los identifiquen. El objetivo de los malos tratos es el poder y el control por parte de la persona que los imponen, se observan en general ocho tácticas utilizadas por los agresores, estas son:

        Uso de la intimidación
        Uso de malos tratos emocionales.
        Uso del Aislamiento.
        Negación, minimización, culpabilización.
        Uso de los niños.
        Uso de privilegios masculinos.
        Uso de malos tratos económicos.
        Uso de la coacción y amenazas. (Gonzales, Carlos. Introducción al Estudio de la Pareja Humana. Pág. 1)

Las parejas que se estructuran según un modo violento tienen un modelo relacional específico, con una pauta repetitiva que abarca a ambos miembros, que son transmitidas por generaciones y avaladas por el entorno. Quien ejerce la violencia la considera una respuesta adecuada a una situación originada exteriormente y quien la recibe la percibe como una acción injusta, inesperada y proveniente de las circunstancias del agresor.

Sin embargo, una investigadora estadounidense, Karen Landenburger,  la cual se enfocó sus estudios hacia las mujeres que habían sufrido maltrato conyugal para entender el proceso deestas al entrar y eventualmente salir de las relaciones abusivas. Ella identificó cuatroetapas que caracterizan las experiencias de mujeres en diferentes momentos como unproceso gradual de sentirse atrapada en una relación violenta, las etapas que señala son:

1.  Etapa de entrega. Al momento de formar pareja una mujer busca una relación positiva y significativa en ella proyectan a su compañero cualidades que ella desea tenga él, si él la maltrata tienden a justificar sus actos y a creer que él terminara el abuso si ella logra satisfacerlo.
2.  Etapa de aguante.  La mujer se resigna a la violencia, con frecuencia trata de fijarse en los aspectos más positivos de su relación para minimizar o negar el abuso, de este modo, modifica su propio comportamiento como un esfuerzo por alcanzar algún nivel de control sobre la situación. En parte se siente culpable por el abuso y trata de esconder su situación con las otras personas, se siente atrapada en la relación y sin posibilidad de salir.
3.  Etapa de desenganche. La mujer toma conciencia de que es una mujer maltratada, una vez que logra poner nombre a su experiencia puede buscar ayuda, generalmente se desespera por salir de la situación pero puede temer por su vida o por la de sus hijos e hijas. Su miedo y enojo puede impulsarla a querer salir de la relación pero este proceso puede requerir varios intentos antes de conseguirlo exitosamente, ya que, comienza a reconocer actitudes y comportamientos de su pareja como actos de violencia, en consecuencia puede demostrarse rechazante y intolerando hacia cualquier actitud o acercamiento que venga del maltratador.
4.  Etapa de recuperación. El trauma  de la mujer no termina con salir de la relación, usualmente pasa por un proceso de duelo por la pérdida de la relación y una búsqueda de sentido de su vida. Trata de entender lo que su compañero le hizo, y por otro lado busca explicaciones sobre las razones que le hicieron quedarse en la relación todo ese tiempo sin arribar a una clara conclusión.

La violencia se establece como los episodios de violencia se desencadenarán cuando esta relación complementaria se vea amenazada, el equilibrio estable se rompe y el poder se impone por la utilización de la fuerza. La combinación de la desigualdad estructural dentro de la familia y de comunidad, y la aceptación general de la violencia como un método de resolución de conflicto dentro de la familia y de la comunidad, constituirían las causas fundamentales de la violencia doméstica.

Mujeres Maltratadas. Las mujeres divorciadas o separadas, jóvenes y de clase socioeconómica baja son las que presentan unas tasas más elevadas de maltrato; sin embargo, la mujer maltratada no muestra ningún tipo característico de perfil de personalidad premórbida, es decir, personalidad caracterizada por signos o síntomas precoces de un trastorno mental. Los defectos específicos pueden indicar si el trastorno progresará hacia una esquizofrenia, un trastorno bipolar o cualquier otro tipo de enfermedad. El aislamiento, el desequilibrio de poder y las conductas alternantes de malos tratos y afabilidad de la pareja predisponen a que estas víctimas creen unos vínculos emocionales muy intensos con sus agresores, lo que explica porqué las mujeres maltratadas deben luchar para separarse emocionalmente de quien las agrede y por qué regresan tan a menudo con el agresor después de haberlo abandonado.

Varones que maltratan. Los agresores no pierden el control, sino que se hacen con él. Las características más frecuentes de los agresores son la dependencia y los celos de su pareja, la creencia en los roles tradicionales de cada sexo, una necesidad extrema de control, hostilidad y dificultad para confiar en los demás, y el rechazo a aceptar la responsabilidad de sus conductas violentas. El 90% de los varones que maltratan no tienen antecedentes criminales.

    II.        Problemas psicológicos. La palabra problema proviene del griego“problema”, compuesto del prefijo pro=delante y blema=lanzamiento que literalmente dice: yo arrojo o lanzo con fuerza. Se determina a través de un asunto o cuestión que requiera una solución. La palabra psicológica proviene del griego, compuesto del prefijo “psyche” que significa “alma” y  “logía” que significa “estudio de”, es decir, estudio del alma. Se aplica a la situación o suceso que provoca una rápida alteración de la manera de sentir y de pensar de una persona o de un grupo de personas. Las problemas psicológicos o enfermedades mentales son alteraciones de los procesos cognitivos y afectivos del desarrollo, consideradas como anormales con respecto al grupo social del cual proviene el individuo. Se puede tratar de alteraciones en el razonamiento, el comportamiento, la facultad de reconocer la realidad o de adaptarse a las condiciones de la vida.
En este caso, se identificará la característica psiquiátrica de un parricida ya que en Chile, según las leyes establecidas, el que comete parricidio, es decir, homicidio de los parientes consanguíneos en línea recta mate a su padre, madre o hijo, a cualquier otro de sus ascendientes o descendientes o a su cónyuge o conviviente pues través de la investigación de la “Caracterización psiquiátrica del delito de parricidio”de Galleguillos, Tamara. Leslie,Andrea. Tapia, Javier yAliaga, Álvaro Aliaga, desde el conocimiento de que comúnmente existen algunas características entre los parricidas varones los cuales dependen de la situación específica del delito que ejecutan, la edad, sexo del victimario y el tipo de victimas, sin embargo,  se señala en “Caracterización psiquiátrica del delito de parricidio ” lo siguiente:

“El perfil de mayor frecuencia, serían adultos en los que existe una alta prevalencia de patología psiquiátrica, en especial esquizofrenia y consumo de drogas o alcohol.” Pag.126.

Es decir que la característica más identificada en los casos de parricidio de adultos en la cual existe un mayor porcentaje de patologías psiquiátricas, y en la más frecuente es esquizofrenia, es decir, es un trastorno de personalidad que es una variación de esquizoide posee los siguientes indicadores en él individuo: incapacidad de comunicación, se encierra en sí mismo, sin emociones, impredecible, una división de la personalidad,ruptura con la realidad  y además,  posee delirios, ya sean visuales, físicos y auditivos. Según el estudio de Cornic y Olie, el típico perfil de un parricida adulto correspondería a:

“(…) La mayoría de los parricidios son cometidos por varones adultos, en una situación en que hay una víctima y un victimario (…) Como principales patologías psiquiátricas se encuentran: esquizofrenia paranoide (56%), trastorno bipolar psicótico (13%), y trastorno esquizoafectivo (8%) y además hasta un 45% tendría trastorno o rasgos de personalidad narcisista. Galleguillos y otros autores. Caracterización psiquiátrica del delito de parricidio. Pág. 128. 2008.


   III.            Femicidio. El término femicidio (femicide) para referirse el asesinato de mujeres por el hecho de serlo y cometido por hombres motivado por el odio, desprecio, placer o un sentimiento de propiedad sobre ellas, a partir de este término nombran estos crímenes en su especialidad, en 1992 Diana Russell y Jane Radford clasifican las distintas formas de violencia de género que padecen las mujeres y que se manifiestan con un progresivo terrorismo sexual, se señalan que estos actos violentos que acaban en asesinatos o muerte de las mujeres son feminicidios, es decir, representa el extremo de un continuo terror anti-femenino que incluye una amplia variedad de abusos verbales y físicos, las cuales son:

Ø  Prostitución.
-       Violación.
-       Tortura.
-       Esclavitud sexual.

Ø  Por teléfono, en las calles, en la oficina y en aulas.
-       Abuso infantil incestuoso o extra-familiar.
-       Golpizas físicas y emocionales.
-       Acoso sexual.
Ø  Clitoridectomia, escisión e infibulaciones.
-       Mutilación genital.

Ø  Histerectomías
-       Operaciones ginecológicas innecesarias.

Ø  Por la criminalización de la contracepción y del aborto.
-       Heterosexualidad forzada.
-       Esterilización forzada.
-       Maternidad forzada.
-       Psicocirugía.
-       Negación de comida (según cultura)
-       Cirugía plástica
-       Otras mutilaciones en nombre del embellecimiento

Legalmente constituye parricidio y en Chile no existe como figura legal por este delito se puede observar en distintas situaciones, sin embargo, el más frecuente es el femicidio íntimo, es decir, el cometido por hombres con quienes la víctima tuvo una relación íntima: familiar, de convivencia, cónyuge, ex pareja, entre otras. Este tipo está asociado en forma importante a una historia de violencia previa y abuso de alcohol y drogas. Otras categorías de femicidio incluyen: femicidio no íntimo, femicidio con agresión sexual, femicidio por causa social y femicidio masivo.
 En Chile, legalmente, comete parricidio el que, conociendo las relaciones que los ligan, mate a su padre, madre o hijo, a cualquier otro de sus ascendientes o descendientes o a su cónyuge o conviviente.  Es un delito poco frecuente, siendo alrededor del 4% de los homicidios. La violencia contra la mujer se encuentra situada en las construcciones de poder que ordenan las relaciones sociales entre mujeres y hombres, las que están asociadas  a las diferencias biológicas entre los sexos, naturalizan roles y funciones, posiciones y jerarquización social asignados según la condición genérica.